Negociar eficazmente con asertividad

Aprende en este nuevo artículo cómo negociar eficazmente con asertividad, para lograr tus objetivos más fácilmente.

En nuestro blog sobre nuestro valor de Compromiso explicamos cómo este es uno de los valores que aporta al desarrollo de hábitos para el liderazgo. No obstante, otro muy importante para lograr un mayor nivel de éxito es la asertividad.

Origen latín

La palabra asertividad proviene del latín assertus, que se refiere a “afirmar algo que es cierto”. el sufijo dad se refiere a una cualidad. Asimismo, el prefijo serere está vinculado con la acción de conducir o alinear.

Por ello, concluimos que la asertividad es la cualidad de una persona para afirmar una verdad, de forma equilibrada, sin ser pasiva, pero tampoco agresiva.

Di lo que piensas

La asertividad se refiere a una capacidad que se puede desarrollar, donde logras decir lo que piensas de manera franca y abierta. Comunicas tus creencias con equilibrio, siendo empático(a) y buscando un resultado positivo para ti y las demás personas a través de la negociación.

Buscas llegar a acuerdos ganar – ganar, para lograr satisfacer las necesidades de ambas partes.

La ansiedad y el miedo

La ansiedad y el miedo son demasiado son los dos sentimientos que más afectan nuestra capacidad para negociar eficazmente con asertividad. Por un lado, dificultan nuestra habilidad para comunicarnos con otros. Y otro, hace que desarrollemos interpretaciones alejadas de la realidad.

Cómo te conviertes en una persona más asertiva

Para ser más asertivo, la clave radica en mejorar tus habilidades de negociación. Para ser mejor negociador, existen pasos o fases, existen técnicas y se requieren habilidades subyacentes.

Fases de la negociación

Básicamente, para la negociación puedes usar tres grandes fases:

  1. Preparación, para conocer por anticipado tus necesidades, las necesidades de la otra persona y la estrategia que usarás para buscar un resultado positivo para ambas partes.
  2. La negociación propiamente dicha, donde estás conversando de forma asertiva con la otra persona. En esta fase, procura seguir los siguientes elementos:
    1. Enfócate los hechos concretos, evitando manifestar tus percepciones personales. Cuando describimos hechos en vez de percepciones, es menos probable la discusión sin salida. Facilita el planteamiento de propuestas. Evita los juzgamientos, el culpar o dejarte llevar por tus emociones distorsionadas.
    2. Comunica tus sentimientos y pensamientos, evitando asociarte con la situación. Trata de hacerlo como si estuvieras siendo otra persona, un tercero independiente diferente a ti mismo.
    3. Realiza tu solicitud o pedido de manera concreta, indicado que esperas que suceda y cómo esperas que pase. Ten presente en este punto que tu no puedes controlar lo que otra persona diga o haga. Solo puedes gestionar lo que tu piensas, sientes y haces; esperar que puedas tener control de lo que otro diga o haga, es una ilusión. Sin embargo, si es posible comunicar lo que, desde tu punto de vista, debería ser la manera más adecuada posible para que la relación mejore, indicándole a la otra persona las conductas concretas que puede hacer. Por ejemplo, en vez de decir, “no quiero que me hagas sentir mal” (genérico y ambiguo), podrías pedir, “me gustaría que cada vez que estés enojado, nos demos 10 minutos de tiempo para calmarnos y evitar decirnos cosas que podrían causarnos dolor”.
    4. Define qué consecuencias generará tu pedido. Trata de hacerlo de forma positiva, más que de forma negativa. Busca que se vea como un premio y no como un castigo. Por ejemplo, podría funcionar mejor decir: “si nos damos ese espacio, te aseguro que vamos a estar más tranquilos para llegar a una mejor decisión y nuestra relación va a mejorar”. En cambio, si dices “si me tratas mal te golpearé”, evidentemente la respuesta probablemente será desastrosa.

Técnicas de negociación

Para negociar, una excelente herramienta de apoyo son los “cuatro acuerdos”, término acuñado del libro de José y Miguel Ruiz que lleva el mismo nombre. Estos cuatro acuerdos son:

  • Evita tomarte las cosas personalmente;
  • No hagas suposiciones;
  • Honra tus palabras; y
  • Haz siempre lo mejor.

Para comprender más estas herramientas, te invitamos a leer el libro o ver el vídeo resumen.

Habilidades subyacentes

Para negociar eficazmente con asertividad, las habilidades subyacentes las describe ampliamente Daniel Goleman en su libro Inteligencia Emocional:

  • Habilidades intrapersonales
    • Auto consciencia acerca de quien eres tu y tu valía
    • Auto regulación de tus emociones, evitando dejarte llevar por las condiciones externas.

En un próximo artículo profundizaremos en estas habilidades.

Esperamos que este artículo te haya gustado.


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