Cómo prepararte para una probable recesión económica en Colombia

Aprende en este artículo cómo prepararte para una probable recesión económica en Colombia. Sigue leyendo para saber más.

Introducción

En artículos anteriores explicamos sobre la importancia del aprendizaje relacionado con finanzas personales. También en el vídeo que se muestra abajo, encontrarás información relacionada. En esta oportunidad, debido al comportamiento de la economía colombiana en los últimos trimestres, te contaremos cómo prepararte para una probable recesión económica en Colombia.

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Desaceleración económica

La economía colombiana ha mostrado signos de desaceleración en el último año, afectada por la pandemia de covid-19, la crisis social, la caída de los precios del petróleo y la incertidumbre política.

Según las proyecciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia en 2023 podría ser la mayor de todas las economías latinoamericanas.Ante este panorama, es importante que las personas se preparen para afrontar adecuadamente una posible recesión económica, que podría afectar sus ingresos, su empleo, su capacidad de ahorro y su calidad de vida.

A continuación, presentamos algunas recomendaciones para hacer frente a este escenario:

Cómo preparase para una posible recesión económica en Colombia: Pasos clave

Revisa el presupuesto personal o familiar

Es fundamental tener claro cuáles son los ingresos y los gastos mensuales y buscar la forma de reducir los gastos innecesarios o superfluos, como las suscripciones a servicios que no se usan, las compras impulsivas o los gastos hormiga.

También es conveniente revisar las deudas que se tienen y tratar de pagarlas lo antes posible, o renegociar las condiciones con los acreedores, para evitar el pago de intereses o el deterioro del historial crediticio.

Aumenta tu ahorro y el fondo de emergencia

El ahorro es la mejor herramienta para enfrentar una situación de crisis, ya que permite contar con un colchón financiero para cubrir los gastos básicos en caso de una reducción de los ingresos, una pérdida del empleo, una emergencia médica o cualquier otro imprevisto.

Lo ideal es ahorrar al menos el 10 % de los ingresos mensuales, y destinar una parte de ese ahorro a un fondo de emergencia, que debe ser de fácil acceso y equivalente a entre tres y seis meses de gastos fijos.

Diversifica tus fuentes de ingreso

Una forma de protegerse ante una recesión económica es tener más de una fuente de ingreso, que pueda compensar una eventual disminución o desaparición de la principal.

Esto puede lograrse mediante la realización de actividades complementarias, como el trabajo por horas, el emprendimiento, la prestación de servicios profesionales, la inversión en activos productivos o la generación de ingresos pasivos, como los intereses, las regalías o las rentas.

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La recesión económica puede traer consigo cambios en el mercado laboral, que exigen a los trabajadores adaptarse a las nuevas demandas y competencias.

Por eso, es importante mantenerse al día con las tendencias y las oportunidades de cada sector, y buscar la forma de mejorar las habilidades y los conocimientos que se tienen, mediante la educación formal, los cursos en línea, los talleres, los seminarios o los libros. Así, se podrá aumentar la empleabilidad, la productividad y la competitividad.

Cuida tu salud física y mental

La recesión económica puede generar estrés, ansiedad, depresión y otros problemas de salud mental, que afectan el bienestar y el desempeño de las personas.

Por eso, es fundamental cuidar la salud física y mental, mediante la práctica de hábitos saludables, como una alimentación balanceada, una hidratación adecuada, una actividad física regular, un descanso suficiente y una recreación sana.

También es recomendable buscar apoyo emocional en la familia, los amigos, los grupos de interés o los profesionales de la salud, cuando sea necesario.

Conclusiones

Estas son algunas de las medidas que se pueden tomar para prepararse para una posible recesión económica en Colombia, que podría afectar el crecimiento, el empleo, la inflación y el bienestar de la población.

Sin embargo, también es importante tener una actitud positiva, proactiva y resiliente, que permita enfrentar los desafíos con optimismo, creatividad y determinación.

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